Recientemente, acaba de finalizar el primero de los dos años en los que está planteado este proyecto y las principales acciones realizadas han sido las siguientes:
En primer lugar, se definieron las principales especificaciones técnicas y legales que debiera cumplir el recubrimiento nanotecnológico para poder ser empleado en el sector agroalimentario, así como el material base a aplicar y las condiciones de curado de dicho recubrimiento. Asimismo, se realizó una completa búsqueda bibliográfica con el fin de preseleccionar los mejores componentes biocidas a incorporar en la formulación de dicho recubrimiento una vez fuera desarrollado y caracterizado físico-químicamente. También se seleccionaron los microorganismos frente a los que se enfrentaría dicho recubrimiento para poder evaluar sus potenciales propiedades bactericidas y de inhibición del crecimiento de biofilms y se puso a punto la metodología de dichos ensayos microbiológicos.
En segundo lugar, tras unas modificaciones realizadas en un protector de base conocida se obtuvo un recubrimiento inicial (todavía sin componentes biocidas) y se corroboraron sus propiedades hidrofóbicas, oleofóbicas y de fácil limpieza tras su aplicación en acero inoxidable.
Después, se sometió a los ensayos biológicos mencionados, que demostraron que el recubrimiento sólo presentaba efecto antimicrobiano frente a un microorganismo y un efecto antibiofilm no todo lo destacable deseado. Así, a la vista de los resultados obtenidos, se comenzó con el desarrollo de un recubrimiento hidrorrepelente que incorporase en su formulación aditivos biocidas. Para ello, de la lista de componentes preseleccionados, se eligió el ZnO/Ag por su doble potencial (antibacteriano y antifúngico) para mayor eficacia, así como por sus buenas perspectivas de producción y costes. A continuación, este compuesto se produjo por FSP a escala nanométrica y se demostraron sus marcadas propiedades bactericidas mediante ensayos tanto cualitativos como cuantitativos. Por último, se llevaron a cabo las primeras pruebas de incorporación de estas nanopartículas en el recubrimiento, evaluando cualitativamente su actividad biocida. Los resultados obtenidos mostraron que la unión del recubrimiento más el ZnO/Ag presenta un muy prometedor efecto antibacteriano, logrando un halo de inhibición con E.coli, cuando el recubrimiento sin aditivar no lo había logrado.
En conclusión, los resultados expuestos muestran que el proyecto ANTIMICRAL ha completado su primera anualidad de manera satisfactoria siguiendo el plan establecido. Con todo, los siguientes pasos, encuadrados en la anualidad de 2019, estarían enfocados en la optimización del proceso de incorporación y de las proporciones de nanopartículas de ZnO/Ag en el protector antiadherente para potenciar sus propiedades biocidas, en la realización de los pertinentes ensayos biológicos que demuestren esas propiedades y, básicamente, en un escalado de la síntesis del recubrimiento final y su aplicación a escala piloto.