Otro sesgo lo encontramos en las pruebas de impacto de los coches, que se llevan a cabo con maniquíes de prueba estandarizados basados en las mediciones, peso y masa muscular de un hombre promedio.
Y también encontramos sesgos de género en la Inteligencia Artificial, donde los algoritmos de los asistentes virtuales de Apple, Google y Amazon refuerzan aún más los estereotipos de género, según un reciente informe de la ONU.
¿Y qué pasa en Navarra? Si en SINAI abordamos esta cuestión en conjunto, estaremos a tiempo de ser la vanguardia en un tema tan innovadoramente esencial como este.