En concreto, la energía solar termoeléctrica (STE), gracias a su capacidad de almacenar energía a coste competitivo, a escala de MegaWatios y para varias horas, permite garantizar la gestionabilidad del sistema utilizando energía renovable. Ello es posible gracias al almacenamiento térmico y la posterior conversión en energía eléctrica.
Existen diversos sistemas de almacenamiento de energía a gran escala, siendo a día de hoy el térmico el que tiene menores costes por unidad de energía almacenada, 5 veces menor que el almacenamiento químico (baterías) y 10 veces menor que el mecánico (volantes de inercia), según informes de la Agencia Internacional de la Energía.
Los sistemas de almacenamiento térmico para STE están basados en sales fundidas de nitratos de sodio y potasio, que típicamente son varios miles de toneladas para en una planta STE, y conforman dos grandes tanques, uno frio a unos 290oC y otro caliente a 560oC. Las sales tienen alta capacidad calorífica, alto rango de temperatura de utilización y bajo coste. En el ámbito del proyecto, se han planificado y diseñado experimentos para innovadoras mezclas de sales con potencial para ser utilizadas en STE y alta temperatura.
El otro objetivo científico y tecnológico del presente proyecto es desarrollar soluciones de acumulación calor para procesos industriales a media y alta temperatura. La disponibilidad de energía y su demanda pueden no coincidir totalmente, lo que hace ventajoso el uso de equipos de acumulación que compensen este desfase. Esto se hace todavía más evidente en el uso de energía solar para calor de proceso y en reutilización de energía térmica.
En definitiva, el proyecto apunta hacia proveer de soluciones innovadoras de almacenamiento energético, tanto a la industria TermoSolar STE como a consumidores de calor para procesos industriales.