30 Nov Lurederra y la UPNA abren el camino hacia nuevos metales más sostenibles
Que sean más duraderos, menos contaminantes, menos vulnerables a las altas temperaturas y más resistentes. Así son los materiales del futuro que están explorando tanto en el centro tecnológico como en la entidad universitaria. Con el fin de avanzar en este campo nació Reducenano 2.0, un proyecto coordinado por ADItech -a su vez agente coordinador del SINAI- y financiado por el Gobierno de Navarra. A largo plazo, el equipo investigador confía en que sus desarrollos se puedan aplicar en la industria.
Fue a partir del Neolítico cuando el ser humano comenzó a trabajar con el cobre, la plata y el oro. La fundición de estos metales permitió fabricar nuevos adornos, armas y herramientas agrícolas que incrementaron la productividad y la eficiencia en el campo. Toda esa evolución marcó un antes y un después en la historia de la humanidad. Tanto es así que, actualmente, sería imposible separar el sector industrial de la metalurgia.
Sin embargo, las nuevas exigencias del mercado y la legislación medioambiental exigen mirar más allá de las bondades que ofrecen los metales disponibles en la naturaleza. Así ha surgido el reto de encontrar o de fabricar nuevas materias primas que, como detalla Cristina Salazar, líder de grupo en la Unidad de Investigación Avanzada del Centro Tecnológico Lurederra, “ofrezcan propiedades diferentes, que tengan un comportamiento o una resistencia distinta ante estreses mecánicos o temperaturas muy altas”.
En ese desafío se enmarca Reducenano 2.0, un proyecto liderado por el Centro Tecnológico Lurederra en colaboración con la Universidad Pública de Navarra (UPNA). La iniciativa está coordinada por ADItech, a su vez agente coordinador del Sistema Navarro de I+D+i (SINAI), y financiada por el Ejecutivo foral en la convocatoria de ayudas a centros tecnológicos y organismos de investigación para la realización de proyectos de I+D colaborativos.
Reportaje de Navarra Capital. Para seguir leyendo pincha aquí.